We’re back.

Cinco años más viejos, volvemos a asomarnos a una nueva campaña electoral Made in France. Como Batman y Robin, sumamos a Batichica y ahora somos tres. Las geniales opiniones expresadas en este blog sólo representan el punto de vista de sus autores.

viernes, 30 de marzo de 2012

Francia y su frívola campaña.

El semanario liberal británico The Economist nos ofrece hoy una provocadora portada con Francia nuevamente como protagonista.
“France in denial. The west’s most frivolous election” (Francia en la negación. La elección mas frívola de los países occidentales), dispara la tapa ilustrada con un fotomontaje del cuadro “Le déjeuner sur l’herbe”, de Edouard Manet. donde dos sátiros burgueses (los favoritos Nicolas Sarkozy y Francois Hollande) cortejan a una señorita desnuda durante un picnic en un bosque.
Para la influyente revista, mientras Grecia, Italia y España comienzan a reducir sus déficits, Francia no aborda con seriedad sus problemas económicos. “Es llamativo que los candidatos no adviertan sobre el calamitoso estado de la economía”, se asombra The Economist, que carga contra Sarkozy: “el candidato que en 2007 pregonaba la ruptura ahora promete proteccionismo”.
En 2007, el semanario le otorgó un importante voto simbólico al conservador Sarkozy por su “programa económico” a pesar de considerarlo “nacionalista” y de “buscar ampliar su base en la extrema derecha”. Solo importaban sus promesas de reforma. En aquella portada The Economist incrustó el rostro del entonces candidato sobre la cara del corso Napoleón Bonaparte, en el cuadro “Napoléon franchissant les Alpes par le Saint-Bernard”, de Jacques-Louis David.
“El presidente de la ruptura”, como lo calificaba, rápidamente desilusionó al otro lado del Canal de La Mancha. Tres años después publicó otra recordada tapa: “The incredible shrinking president” (el presidente que se encoge), donde a los pies de Carla Bruni, Sarkozy desaparecía escondido dentro de un bicorne, el celebre sombrero de dos puntas utilizado por el Emperador francés.
Ora recordada tapa de la revista preferida de los liberales anglosajones fue publicada en junio 2011 en honor a Silvio Berlusconi: “The man who screwed an entiere country” (en porteño, seria algo así como ‘El hombre que se cogió un país entero’).
La revista afirma que “difícilmente” Hollande pierda la elección, pero no por sus meritos, sino porque la crisis económica en la zona euro ha arrasado con casi todos los presidentes de los países en dificultades. En un articulo donde la información económica esta mechada con finas dosis de ironía y humor british, The Economist finaliza lapidariamente: “los ‘picnickers’ de Francia están a punto de ser hundidos por la dura realidad, cualquiera sea el presidente”.

jueves, 29 de marzo de 2012

Si fuese presidente (o dictador)


Los franceses decidirán su voto en función de sus principales preocupaciones. Estas son: el poder adquisitivo (42%) y el desempleo (30%). Muy lejos detrás, la inseguridad, apenas el 8%, según un sondeo publicado el martes 27 de marzo por la encuestadora BVA. Por mi parte acerco 10 modestas proposiciones. No parecen tan cruciales como las arriba mencionadas pero estoy convencido de que harían de Francia un lugar mejor. Se aceptan otras sugerencias.
1. Obligar a los canales públicos de televisión a ofrecer la versión original de las películas. Sépanlo de una vez: no existe algo llamado un buen doblaje.
2. Que las entrevistas al presidente las hagan periodistas anglosajones.
3. Cursos obligatorios de simpatía para los mozos de todo el país.
4. Erradicar del lenguaje “talkie walkie”. Es “walkie talkie”.
5. Ídem para “Dark Vador”, es “Darth Vader”.
6. A partir del 21 de abril y hasta el 21 de septiembre es obligatorio haberse puesto desodorante para ingresar al metro.
7. Dividir por diez las abreviaciones en el lenguaje cotidiano. Basta de RTT, SNCF, JT, RER…
8. Prohibido hablar de las pruebas del bachillerato (BAC) durante una fiesta después de los 25 años de edad.
9. Obligar al diario Le Monde a imprimir en sus páginas la fecha del día de su publicación, y no la del día siguiente como ahora, incurriendo en periodismo de anticipación.
10. Explicar a los DJ's de las radios que la música pop no es sólo las de los años 80.

miércoles, 28 de marzo de 2012

2012 c’est carnaval !


El carnaval político de la elección presidencial francesa resumido en un afiche presente en varios rincones del nordeste parisino.

Fdr: Dos aspirantes que aparecen en la foto no lograron homologar sus candidaturas: Dominique de Villepin y Corinne Lepage. Y uno que nadie esperaba, finalmente se coló: el franco argentino Jacques Cheminade. Un personaje por demás peculiar, a descubrir próximamente en Franciavota.

lunes, 26 de marzo de 2012

Modelos 2012: la cilindrada de los candidatos

Si Nicolas Sarkozy fuera un coche sería un Porsche 911 y Marine Le Pen, un gigantesco Hummer. Al socialista François Hollande se le asocia con un Renault Scénic y a la ecologista Eva Joly con un coche sin licencia.

Los candidatos a la presidencia francesa encienden sus motores. Tras una semana en la que la campaña se quedó en suspenso por los asesinatos de Toulouse, vuelve a reanudarse la carrera hacia el Palacio del Elíseo. Un circuito cerrado en dos tiempos con diez candidatos que pondrán a prueba sus dotes de piloto, sus motores y su carrocería.

Unos son viejos muy conocidos con motor de última generación, otros se estrenan pero huelen ya a cuero desgastado y chapa oxidada. Los que intentan renovar con modelos híbridos parten como perdedores.

Hay muchas maneras de abordar la campaña electoral y evitar ángulos soporíferos. La revista Auto-Journal ha llevado a cabo una original encuesta. ¿Qué coche representa mejor a los candidatos? Nicolas Sarkozy, sería un Porsche 911 “quizás por su origen burgués y por su aire deportivo”, señala la publicación que añade que los franceses creen que el vehículo le va como anillo al dedo por la “chulería”o “fanfarronería” de uno y de otro.

La ultraderechista Marine Le Pen es un Hummer, un 4x4 militar estadounidense antiguo y arcaico pero muy potente. “Sólido, imponente y todo terreno”, afirma la publicación del vehículo asociado a la candidata del Frente Nacional.

Menos divertidos, si fueran coches, el socialista François Hollande y el centrista François Bayrou serían el mismo, el Scénic de Renault, un monovolumen fabricado en Francia, práctico pero sin ningún tipo de encanto. Y los candidatos anticapitalistas Jean-Luc Mélenchon y Nathalie Artaud serían o un Dacia Logan, “modelo económico” donde los haya o un antiguo Citroën 2CV.

La verde Eva Joly sería un coche ecológico, un híbrido Toyota Prius pero también un coche que pueda conducirse sin permiso. Auto-Journal interpreta que los franceses encuestados no le otorgan ninguna confianza para dirigir el país.