De un Palacio al otro ?

El 16 de mayo a medianoche Jacques René Chirac abandonará su residencia de estos últimos 12 años, el señorial Palacio del Eliseo. Su destino podría ser otro Palacio, el de Justicia en la otra orilla del Sena. Hay varios 'dossiers' que lo amenazan, la mayoría anteriores a 1995 cuando fue Alcalde de la capital durante 18 años. Los causas en las que figura implicado van desde la creación de empleos ficticios para los afiliados de su partido (si, el ñoqui argentino es de exportación!) a sospechadas adjudicaciones de contratos públicos. La única causa que salpica su pobre mandato, y junto a él a su esposa Bernadette, es haber recibido billetes de avión gratis en los últimos años a cambio de otorgarle la habilitación en setiembre del 2006 a la compañía Euralair.

A los 74 años, el gaullista Chirac constituye un caso de longevidad excepcional en Europa, sin embargo parece estar lejos de querer retirarse y por eso no duda en afirmarle a su pueblo que "ahora llegará el tiempo de servirlos de otras forma". Se presentará Chirac a las elecciones legislativas (junio próximo) en busca de una banca que lo mantenga inmune a la justicia cual dictador tercermundista en retirada? O realmente habrá un proceso en su contra? La duda es grande, especialmente al ver la condescendencia con que Francia trata a su clase política. El ex premier Alain Juppé, otrora delfín de Chirac, disfruto de la benevolencia de la Justicia en la misma causa de empleos ficticios que Chirac. Tras los 14 meses de condena que lo marginaron de pelearle la candidatura a Sarkozy, Juppé ya se encuentra de regreso en la paqueta Alcaldía de Bordeuax y sosteniendo a viva voz a... Sarkozy para reacomodarse de cara a un nuevo gobierno. Nadie en Francia se sorprende por esta situación. Las denuncias de que la pareja Royal-Hollande sobrestima su patrimonio para pagar menos impuestos, o que Sarkozy se benefició con una rebaja record en la compra de su departamento siendo Alcalde tampoco pesan en la campaña, como si los franceses consideraran normal que sus políticos utilicen influencias para evadir al voraz fisco.

Hace 15 días, Chirac anuncio que no buscará el "sufragio de los franceses" para un tercer mandato, desde ese momento los elogios se multiplicaron en boca de expertos y comentadores. Sin embargo, escasos fueron los medios que evocaron la posibilidad de que deba pasar a rendir cuentas ante la justicia. Hay momentos en que hasta los medios parecen proteger a los políticos, salvo rescatables excepciones, como por ejemplo el semanario satírico Le Canard Enchainé. Es indudable que hay problemas en Francia para criticar a quienes se encuentran en el poder.

Foto: Chirac en la campaña presidencial 1981.