We’re back.

Cinco años más viejos, volvemos a asomarnos a una nueva campaña electoral Made in France. Como Batman y Robin, sumamos a Batichica y ahora somos tres. Las geniales opiniones expresadas en este blog sólo representan el punto de vista de sus autores.

martes, 1 de mayo de 2007

Dime lo que comes y te diré quien eres

En el fragor de las maniobras electorales por captar el voto de los ciudadanos, los candidatos apelaron en sus discursos a citas disímiles que abarcaron desde Leon Blum y Jean Jaurès a Charles de Gaulle y François Miterrand, entre otros, pero ninguno de ellos se animo a invocar al brillante Jean Anthelme Brillat-Savarin, el hombre que escribió ‘Dime lo que comes y te diré quien eres’ y ‘La fisiología del gusto’. En Francia la gastronomía llega a su máxima expresión y posee un estatus cuasi comparable al del arte, es indudable que importa y mucho que comen los candidatos a la presidencia.



De dieta durante su campaña, Sarkozy afirmó comer “todo lo que da energía” y de “manera compulsiva” pero lo que pierde al aspirante es el chocolate que consume “sin importar la marca ni la calidad”. Los sabios aztecas se referían al chocolate como “el alimento de los dioses”, quizás por eso Sarko engulle innumerables cantidades de las grasosas barras de cacao. El chocolate contiene componentes químicos con efectos neurotransmisores en el cerebro y una sustancia parecida a la cafeína. Además, posee más antioxidantes que el vino, por eso –según los expertos- el secreto de la pasión es la combinación de ambos. Sin embargo, el apasionado y vehemente Sarko no bebe vino. Un sacrilegio inadmisible en un país como Francia donde el vino y el agua mineral se consumen a raudales. ¿Condicionará esto el voto de los adinerados e influyentes viticultores? ¿Votarán igual por el derechista? Durante la campaña Sarkozy visitó viñedos y bodegas en Sancerre bebiendo un sorbo del fresco, frutal y vivaz blanco del lugar para las fotos, pero evitando tragarlo y escupiendo el líquido no vaya a ser cosa que algunos centilitros de vino saquen a la luz su irascible y temperamental carácter que tanto se esfuerza en disimular. Esta claro que por su estilo, el candidato se encuentra más cercano a las bebidas estimulantes como Gatorade o Speed para recargar la ambiciosa maquina corporal que al elixir dionisiaco.
En cambio, los hábitos alimenticios de Royal son diferentes. La socialista confeso que acostumbra a “cocinar sopas para sus cuatro hijos” y que su alimento preferido es ‘le Chabichou’, un cremoso queso de cabra con su corteza florecida por la fermentación. Ségo se declaró fanática del queso de su región y hasta en varias entrevistas se animó a recomendar uno de sus platos de cabecera: el milhojas de berenjenas y Chabichou. Todos recuerdan cuando antes de las legislativas en 1988 Ségo apareció en Paris vestida con las ropas tradicionales, un delantal y una canasta con quesos bajo su brazo en su campaña para lograr que el Chabichou obtenga la Apelación de Origen Controlado (AOC). Cometido que la presidenta del Consejo Regional de Poitou-Charentes y diputada de Deux-Sévres logro dos años después. Royal si bebe alcohol y por eso aconseja que el Chabichou sea acompañado por una tostada y una copa de pineau de Charentes.
El domingo hay que elegir, no gozo del derecho pero personalmente si tuviera que votar y si mi elección se basaría meramente en el carácter culinario de los candidatos escogería a Royal sin dudarlo, al menos en este plano nuestras afinidades son muchas.

1 comentario:

Mily Almeyra Casas dijo...

Me gusta lo que come Royal y la votaría encantada si fuera ciudadana francesa. Sigo feliz !! Un abrazo